Absorto
Con la lupa en la mano
Contemplando no sé qué helecho o qué geranio
Fuera del mundo de los hombres
Comienza a comprender algo antes oculto.
Una margarita, creo, le crece en el sombrero.
De su cabello surge un campo de amapolas
Y un lento caracol asciende por su abrigo de campo.
Así es, o así recuerdo, al menos,
La ilustración de aquél libro inglés de alguna biblioteca.
Un libro que hablaba de cosas sencillas.
De estaciones, de salir al jardín y ver las flores.
De por qué las margaritas crecen agrupadas.
De cómo encontrar la belleza en los solares y baldíos.

Ni qué decir tiene
Que me enamoré al instante de la imagen.
Hace unos meses reencontré a un amigo
Perdido tiempo atrás, en la vorágine de la juventud,
Aquél tiempo que tanto recuerda a la violenta primavera.
Ese amigo era pintor, y como yo,
Cumplía ahora el tránsito
Del rock y del pop a la naturaleza y a la luz, repitiendo
de algún modo las mismas preguntas en distintos lugares.
Le pedí una imagen de mí mismo contemplando el mundo

Y su dibujo fue el de un hombre profundamente absorto
Fotografiando no sé qué helecho o qué geranio
Mientras las margaritas le crecen en la ropa
Y las mariposas le ignoran.
Casi fundido, confundido, con el mundo que observa.
Un hombre en calma que sin darse cuenta
Comienza a esbozar una sonrisa.




  Javier Gutiérrez Palacio. Fotopoemas. Fotografía de naturaleza y poesía.